Es como una especie de fiebre. Aunque tengo otros trabajos empezados me he puesto a coser totes. Para aprovechar retales, para el mercado solidario, para el buen tiempo...cualquier motivo vale. Me gusta cómo están quedando, aunque no hay una igual a otra. El trabajo en serie no es lo mío y cada bolsa tiene algo diferente así voy probando y me divierto mucho más. Mi máquina de coser vuelve a echar humo y yo estoy feliz!